A esta entrada le puse ese título ya que hoy me dí cuenta de muchas cosas, tanto buenas como malas...
Me quedé conversando con una amiga en el metro, me sentía algo mal por algunos problemas que pasaron, los cuales habían "transformado" mi forma de ser, estaba muy irritable y por todo me enojaba (aunque fuera lo más mínimo). Lo admito, admito que no era la mejor forma de responder ante la situación, pero ya estaba cansada de todo...
Pensaba que me gustaba alguien, alguien que había conocido hace unas semanas pero después de desahogarme y conversar me di cuenta que en realidad era más que nada un "capricho" mio, por querer tener a alguien a mi lado acompañándome.
Resumiendo todo (ya que estoy con sueño y no quiero escribir mucho) es que me siento mal por haber tratado así a esa persona, ya que a pesar de que no me gusta le tengo algo de cariño... en fin, creo que todos debemos aceptar cuando estamos equivocados, admitir nuestros errores, ser sinceros con nosotros mismos y aunque cueste (y lo digo porque es una de las cosas más difíciles de hacer, lo digo por experiencia propia) hay que tener a alguien en quien poder confiar, sea de tu familia o de personas externas a esta. Cada uno tiene su propio baúl con secretos bajo mil llaves, pero llega un momento en que lo único que quieres hacer es entregarle esa(s) llave(s) a alguien... aún no sabría que decir, ya que he tenido muy malas experiencias en cuanto a eso, mi baúl está que explota pero no puedo entregarle esa llave a nadie... lamentablemente...
Bueno eso sería todo por hoy, me voy a ver Dr. Who? con mi mamá :O
Atte. Amélie