*El Baile*

“…Comienza la música, el bailarín comienza a bailar, la luz lo enfoca solo a él, pero se detiene cuando sin avisarle enfocan a una bailarina, el aun bailando se acerca a ella que permanece con los ojos cerrados, la rodea suavemente al ritmo de la música y ve que tiene una pequeña manecilla en su espalda, comienza a girarla lentamente y cuando para la bailarina comienza a bailar, el se le une, y mientras baila a su lado tomándola de la cintura y elevándola en lo alto siente que su corazón esta latiendo tan rápido que no puede respirar, cuando se separaron sin ninguna razón ella se detuvo mirando al cielo, el mientras aun bailaba se acerca rápidamente a ella, delicadamente la mira y gira nuevamente la manecilla de su espalda. Sentía que el baile se hacía eterno cuando ella bailaba junto a el pero cada vez que ella se detenía era como si una parte de el moría…
Hasta que ella no pudo más porque su cuerda se desgasto, bailaron juntos, el tomándole su helada mano y ella solo mostrando una sonrisa vacía. El con la mirada agachada se acerco lentamente a su lado, la observo detenidamente, acaricio sus rosadas y pálidas mejillas, vio que tenía sus ojos cerrados e imitándola los cerro y acerco su frente a la de ella, su boca se abrió y muy bajo le dijo: “te quiero”, luego beso sus labios rojos y fríos, volvió a abrir los ojos y alejo su frente de la de ella y cuando estaba decidido a irse ella abrió los ojos lentamente, bajo de la pose en la que estaba y lo miro detenidamente el sonrió y su corazón latió tan fuerte como cuando bailaba con ella, por primera vez la bailarina sonrió con ternura y amor, él, muy caballeroso hiso una reverencia y extendió la mano, mientras que la misma canción sonaba pero esta vez era más lenta, ella lo miro y poso su mano en la de él, aceptando el baile, sintió esa calidez que tanto deseaba de parte de ella, siguieron bailando eternamente esa canción que los unió y cuando estaba por terminar él, la levanta nuevamente muy alto y cuando baja y quedan frente a frente se sonríen mutuamente, él le acaricia su rostro, juntan sus frentes, ambos susurran un te quiero y se besan por un largo rato, pero aunque para ella sea igual que la primera vez para el no, ya que cada vez que acaricia su rostro, junta su frente con la de ella y la besa, siente la calidez de su cuerpo, alma y amor…”

Amélie~